Al iniciar un tratamiento de Reproducción Asistida nos llevamos una sorpresa "ese torrente emocional que nos va a acompañar durante un tiempo".

Suele ocurrir que si nuestra búsqueda de embarazo no es en el plazo estipulado médicamente y porqué no decirlo "socialmente", optemos por silenciarla. ¿Crees que es lo mejor?.

Estos son algunos de los motivos:

Estoy cansada que me pregunten cada mes (me hace daño porque vivo mi regla como un duelo).

No soporto que me digan algunas frases tipo "no te preocupes cuando te relajes te quedarás" (relajarme.... no puedo señor@s).

Me siento mal emocionalmente cuando tú mi amiga, hermana o cuñada me envías esa foto de tu primera eco (algo que me imagino vivir y no está sucediendo).

¡En el trabajo tengo que ausentarme para realizar tantas pruebas! (y aun siendo una enfermedad tengo que justificarla).

No te sientas mal amiga, todo forma parte del proceso. Aparecerá el miedo a lo desconocido, la ansiedad anticipatoria de empezar un tratamiento y de una vez realizado conocer el resultado, también aparecerá la tristeza y la ira si no se consigue el deseado embarazo.

Pero ¿Y si intentamos llevarlo de otra manera, dándole cabida también a la emoción de alegría?

Cambio el silencio por la verdad: eso te hará sentir más calma.

A frases incómodas respuestas sutiles ¡prepáratelas!.

Si no estoy preparada para recibir noticias de embarazos cercanos ¡pido respeto y empatía!

En el trabajo legalmente te pertenece tus tiempos para pruebas médicas: mi consejo habla con tu superior y háblale de tu enfermedad.

Y aún así seguirá apareciendo emociones pero intentaremos neutralizarlas, escuchándolas y dándoles el espacio que necesita,

"eso te aseguro que te ayudará".

Y aún así costará gestionarlas pero estoy segura de que "tú eres fuerte y valiente".

♥ No olvides hablarte bonito porque en esta historia ocupas un lugar muy importante ♥